Estamos respirando los contaminantes comunes del aire interior.

En nuestros hogares, en nuestras oficinas y en nuestros lugares de trabajo hay elementos que podrían estar contaminando el aire que respiramos.

Si se tienen problemas como goteo nasal crónico, picazón, ojos llorosos o tos persistente y no estamos en la temporada típica de alergias, puede que esos síntomas se deban a un problema con la calidad del aire en los interiores donde vivimos o desarrollamos nuestras actividades cotidianas.

El 90 % de nuestro tiempo lo pasamos en interiores y si hay algo en su aire que emite un contaminante, es muy probable que lo estemos respirando.

Cosas que tenemos y pensamos que nos benefician en realidad podrían estar comprometiendo la calidad del aire y nosotros ni nos hemos dado cuenta.

Por eso te contamos algo sobre estos 5 contaminantes del aire que deberías conocer:

Los compuestos orgánicos volátiles o COVs

¿De dónde vienen?

Los compuestos orgánicos volátiles (COVs) son sustancias orgánicas con una gran facilidad para evaporarse a temperatura ambiente. En ambientes interiores pueden liberarse al aire desde fuentes como disolventes, pinturas, adhesivos, plásticos y otros productos de la construcción y el mobiliario.

¿Cómo afectan a las personas?

Con respecto a daños directos sobre la salud, se producen principalmente por vía respiratoria, aunque también pueden entrar a través de la piel. Como efectos que pueden producir están problemas respiratorios, irritación de ojos y garganta, mareos, etc. También se pueden dar efectos psiquiátricos (irritabilidad, dificultad de concentración, etc.).

¿Qué podemos hacer?

Invertir en una buena aspiradora con filtro HEPA puede ayudar a mejorar la calidad del aire interior, al igual que un purificador de aire que puede destruir contaminantes, olores y COV. Una gran solución para mejorar la calidad del aire es la tecnología ActivePure, que elimina todo tipo de patógenos y contaminantes del aire. ActivePure tiene una gama amplia de unidades de purificación y descontaminación del aire perfectas para oficinas, empresas, establecimientos comerciales y hogares.

El moho

¿De dónde viene?

El moho crece en lugares con mucha humedad, como alrededor de las filtraciones en techos, ventanas o tuberías, o donde hubo inundaciones. Muchos materiales de construcción proveen los nutrientes adecuados para estimular el crecimiento del moho. El moho crece bien en productos de papel y de madera, en cartón y por supuesto en las plantas de interior.

¿Cómo afecta a las personas?

La exposición a ambientes húmedos y con moho podría causar diferentes efectos en la salud, o ninguno. Algunas personas son sensibles al moho, en ese caso la exposición al moho puede provocarles síntomas como congestión nasal, sibilancias, o enrojecimiento o picazón en los ojos o la piel. Algunas personas, como las que tienen asma o alergias al moho, podrían presentar reacciones más intensas.

¿Qué podemos hacer?

Inspeccionar las edificaciones en busca de evidencias de daño por agua y moho visible como parte de su mantenimiento de rutina. Solucionar las condiciones que estén causando el crecimiento del moho para prevenirlo. Controlar los niveles de humedad. Ventilar las áreas con más humedad.

El benceno y el tolueno

¿De dónde vienen?

Las mayores concentraciones de tolueno generalmente se producen en el aire interior por la utilización de productos domésticos comunes tales como pegamentos, pinturas, disolventes, cera para muebles, detergentes, productos de limpieza y el humo del tabaco y de las velas.

¿Cómo afectan a las personas?

Los efectos en la salud humana y en el medio ambiente dependen de la cantidad presente y de la duración y frecuencia de la exposición. Los efectos también dependen de la salud de la persona. Niveles bajos o moderados pueden afectar al sistema nervioso, producir cansancio, confusión, debilidad, pérdida de la memoria, náusea, pérdida del apetito y pérdida de la audición y la vista. Estos síntomas generalmente desaparecen cuando la exposición termina.

¿Qué podemos hacer?

La mejor herramienta es mejorar la ventilación, o sea, abrir las ventanas siempre que sea posible, y así nos aseguráramos de que todos esos contaminantes que se generan en el interior se van a diluir con el aire exterior. Pero debemos también pensar en instalar purificadores de aire o algún tipo de filtro en los sistemas de climatización.

Fragancias artificiales

¿De dónde vienen?

Los encontramos en casi todos los productos de lavandería como detergente, lejía y suavizantes de telas

¿Cómo afectan a las personas?

Las sustancias químicas que componen estos productos se emiten directamente desde la ventilación de la lavadora o secadora y pueden introducirse en el cuerpo a través de los poros y del aire que respiramos. Hay muchas personas sensibles a este tipo de elementos a quien les puede provocar reacciones como migrañas, vómito, mareo, erupciones o sensibilidad.

¿Qué podemos hacer?

Las unidades como Laundry Pro 2.0 con tecnología ActivePure reducen o eliminan la necesidad de blanqueadores, detergentes y suavizantes de telas, lo que significa que los vapores no vuelven a circular y como beneficio adicional, no están en contacto con la piel ni se filtran al agua residual.

El ozono

¿De dónde viene?

EAlgunos ionizadores, impresoras u otros equipos de ofimática, además de ozonizadores específicos. De los vapores de lejía, amoníaco y otros limpiadores domésticos.

¿Cómo afecta a las personas?

Son muchas las reacciones que se pueden dar por una intoxicación en el aire de este elemento o por respirar demasiado ozono, desde dermatitis de contacto, irritación respiratoria, hipersensibilidad bronquial, así como desencadenar síntomas de asma y alergia.

¿Qué podemos hacer?

No utilizar electrodomésticos o aparatos que generen ozono. Los ingredientes de limpieza ecológicos como el vinagre blanco, el limón y el bicarbonato de sodio pueden ser igual de efectivos y sin un impacto negativo en la calidad del aire interior. También tienes la alternativa de limpiar con el agua tratada de Laundry Pro 2.0, que elimina o reduce el uso de productos de limpieza sin generar subproductos químicos ni ozono.